Los portaaviones de la clase Kitty Hawk fueron los mejores portaaviones convencionales jamás construidos. Desarrollados en la era de la Guerra Fría, se diseñaron para superar a sus predecesores de la clase Forrestal. Estos buques se distinguían por su mayor longitud, la disposición de los ascensores y una isla más pequeña y retrasada, optimizando así el manejo de aeronaves de ataque pesado como el A-3 Skywarrior y el A-5 Vigilante.
Los buques de guerra de la clase Kitty Hawk, incluido su último variant el USS John F. Kennedy, fueron los últimos portaaviones de la Marina de EE.UU. propulsados por calderas de aceite en lugar de plantas de energía nuclear. Su propulsión consistía en cuatro turbinas engranadas Westinghouse, 280,000 shp, cuatro ejes con ocho calderas Foster Wheeler de 1,200 libras por pulgada cuadrada (8,300 kPa).
Conoce la Clase
Tres astilleros diferentes fueron utilizados para construir los cuatro barcos de la clase, con los dos primeros: USS Kitty Hawk (CV-63) y USS Constellation (CV-64) construidos en New York Shipbuilding Corporation en Camden, Nueva Jersey, y el Astillero Naval de Nueva York en Brooklyn, respectivamente. El USS America (CV-66) y el USS John F. Kennedy (CV-67) fueron construidos en Newport News Shipbuilding, entrando en servicio en 1967 y 1970 respectivamente.
El tercer buque de la clase, el USS America, presentaba varias diferencias con respecto a las primeras unidades de la clase, incluyendo una disposición de anclas modificada y un sistema de sonar AN/SQS-23, siendo el único portaaviones estadounidense de la posguerra construido con sonar, aunque fue retirado a principios de los años 80.
Los cuatro portaaviones de la clase Kitty Hawk fueron construidos con catapultas de vapor y cada uno de ellos podía llevar unas 2,150 toneladas de municiones de aviación y aproximadamente 7.38 millones de litros (1.95 millones de galones estadounidenses) de combustible de aviación para sus respectivos grupos aéreos.
Historia de Servicio
Durante la guerra de Vietnam, los tres primeros portaaviones de la clase Kitty Hawk participaron en la guerra aérea sobre Vietnam del Norte. Aunque el cuarto portaaviones de la clase, el CV-67, no fue desplegado en Vietnam, sí estuvo en la región durante la Guerra de Yom Kipur en el Medio Oriente en 1973. Durante los años 70, el rol de los portaaviones de la clase Kitty Hawk fue adaptado para incluir una capacidad antisubmarina además de su tradicional papel de ataque.