El K2 Black Panther, un monstruo de entre 55 y 61 toneladas, es el pilar del poderío de tanques de Corea del Sur, contrastando con los modelos K1 y K1A1 y el T-80 ruso para contrarrestar las fuerzas blindadas del ejército norcoreano.
En un mundo donde las amenazas son impredecibles, Corea del Sur ha respondido fortaleciendo su arsenal. Uno de sus más impresionantes logros es el K2 Black Panther, reconocido por el Libro Guinness de los Récords como el tanque de combate principal más caro del mundo, con un precio de $8.5 millones por unidad.
Desarrollado por Hyundai ROTEM en colaboración con la Agencia de Desarrollo de Defensa, el K2 no sólo destaca por su costo, sino que también es uno de los tanques más avanzados del mercado actual.
Armado con un cañón CN08 de 120mm y dos ametralladoras, la precisión y capacidad de fuego del K2 es inigualable, capaz de rastrear objetivos a 6 millas de distancia. Además, puede alcanzar velocidades de 70 km/h y superar obstáculos de hasta 1.8 metros de altura.
Con un diseño preparado para cruzar ríos de hasta 4.1 metros de profundidad, el K2 es una fortaleza móvil diseñada para dominar el campo de batalla.
Corea del Sur ha apostado por la tecnología y la innovación, utilizando un motor de 1,500 caballos de fuerza desarrollado por MTU y una armadura modular compuesta que rivaliza con el tanque Abrams MIA2 del ejército estadounidense.
El futuro del combate blindado está aquí, y el K2 Black Panther está listo para enfrentarlo.
